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sábado, 21 de marzo de 2009

Un rincón magico en Zaragoza...

17/03/2009.
Fuentes luminosas del Parque Grande. Zaragoza.










domingo, 1 de marzo de 2009

Bicentenario de Los Sitios de Zaragoza II

Zaragoza ha viajado en el tiempo este fin de semana doscientos años, para recrear uno de los episodios más trágicos de su historia: la defensa frente a la invasión napoleónica durante la Guerra de la Independencia. Más de 300 personas han recreado estas batallas de Los Sitios de Zaragoza, hoy en el Palacio de la Aljafería, ha sido organizada por Voluntarios de Aragón, la Fundación Zaragoza 2008 y la Asociación Napoleónica Española. En ella participan también grupos llegados de Francia y de Polonia.
Las fotos:
Palacio de la Aljafería antes de la batalla...

En los fosos se preparan las armas.


En el exterior, los mandos de las tropas aragonesas inspeccionan el terreno.
Un escopetero del arrabal me apunta, así que le saco la bandera blanca...eh que solo estoy haciendo fotos maño!!

Se preparan para la dura batalla y...

Atención, un oficial francés se lanza al ataque....

La batalla es durísima, el humo lo cubre todo, el ruido de los cañones es ensordecedor...


Desde el Palacio, el ejercito aragonés lucha a cañonazos contra el enemigo francés.



Las bajas aragonesas son innumerables...


En los fosos, el enemigo se hace fuerte y el combate cuerpo a cuerpo es inevitable.


El Padre Boggiero se enfrenta al ejercito francés con valentía.

se podría decir que con fiereza...

Las tropas aragonesas agotan sus últimos cartuchos, pero la suerte ya está echada...


El Mariscal Lannes y Pedro María Ric, firman la capitulación de Zaragoza.


Bicentenario de Los Sitios de Zaragoza I

Celebrando el Bicentenario de Los sitios de Zaragoza, hoy he recorrido la ruta del Ebro:
Murallas / Manifestación / Espoz y Mina / Plaza del Pilar / Náutico/ Puente de piedra / San Lázaro / Molino del puente de tablas/ Sobrarbe / Jorge Ibort / Pza del Rosario/ Lacruz / García Arista / Arboleda de Macanaz.

En esta ruta se ha hablado de la importacia que tuvo el barrio del Arrabal en la defensa de Zaragoza durante la invasión francesa.
Durante el primer Sitio a la ciudad, los franceses no pudieron llegar a la margen izda del Ebro, así que nos situamos en los hechos acontecidos durante el segundo Sitio a Zaragoza.

Se inicia en Diciembre de 1808 cuando los franceses atacan la ciudad por el camino de Villanueva.
Palafox hace que se retiren hacia Juslibol, causando 700 bajas. Las principales defensas del arrabal se situaban en el Convento de Jesús, en el de San Lázaro y Altabás.

El 18 de Febrero tras 60 dias de asedio en el que los franceses dispararon más de 5.700 proyectiles, cae el Arrabal y Zaragoza tardaría solo 3 dias en capitular, porque no se rindió, CAPITULÓ.

"A mediodía, cuatro brechas se encontraban abiertas en las endebles murallas que formaban el cerco del arrabal: dos en las primeras casas, cerca del muro del convento de San Lázaro, una en su iglesia y la cuarta en el convento de Santa Isabel, situado al otro lado de la carretera de Barcelona. En éste, la batería 31 había comenzado por abatir una puerta que daba al patio. Pronto quedó destruida, pero los campesinos la reedificaron y la sostuvieron con sus brazos. Una nueva salva la destruyó y por segunda vez fue levantada. Para poner fin a esta obra, los franceses abatieron sus pilares. Se encontraron un montón de cadáveres detrás de esta puerta que, cada vez que caía, sepultaba a los que la sostenían. Un oficial francés la llamó: "la Sublime Puerta" .
Las fuerzas españolas contaban con unos 32.000 soldados regulares, con abundante Caballería y unas 160 piezas de artillería, además de miles de paisanos voluntarios, hasta un total de unos 45.000 hombres.
Los franceses, mandados por Moncey, cuentan con el V Cuerpo (Mariscal Mortier, compuesto por veteranos de Alemania, con las divisiones de Suchet y Gazan) en la margen izquierda del Ebro, y el III Cuerpo (Mariscal Moncey, con veteranos del primer sitio) en la derecha, hasta un total de unos 50.000 hombres (40.000 infantes, 3.500 jinetes, 1.100 zapadores, 48 cañones de sitio y 84 piezas ligeras). En total, los franceses tuvieron unas 10.000 bajas y emplearon casi 80.000 kg.de pólvora para ocupar la ciudad. Los defensores sufrieron unos 54.000 muertos, a los que seguirían otros 8-10.000 en días posteriores, casi todos a causa de las epidemias.


Y ahora las fotos:

Compañía de Los Pardos de Aragón.


Cruz de piedra homenaje al Padre Boggiero, Santiago Sas y el Barón de Warsage, asesinados en él y arrojados al Ebro.

Jefe de tambores de los Voluntarios de Aragón.

Escopetero del arrabal: vestido con red en la cabeza y sombrero de fieltro con escarapela roja, color de España, camisa, chaleco, fajín, pantalones, polainas, medias, alpargatas y manta a la que le hacian una abertura para llevarla como un poncho. Lleva canana y escopeta.

Acompañado de un oficial del Tercio de Gallegos argentino.


Tocado con chistera británica y plumas de guacamayos.


Batallón de infantería ligera 1ª de voluntarios de Aragón. Llevan bicornio de fieltro negro y pluma verde, escarapela roja, casaca y zapatos con polainas.Correajes, mochila, bolsa, cartuchera ventral (canana) y escopeta.


Oficial de la Guardia Imperial francesa. Lleva gorro de piel de oso, chapa de latón dorado, cordón con raqueta blanco y pluma roja.Casaca con charreteras rojas, chaleco blanco, pantalón blanco, botas, correajes, mochila y bayoneta.

Vamos acabando el recorrido, primero una foto de varios héroes y heroínas de los Sitios.
Parque Macanaz, de Izda a Drcha: tío Jorge, Agustina de Aragón, Condesa de Bureta, Casta Álvarez, María Agustín y tío Antón.

El final del recorrido ha sido en la Cripta del Pilar, en la que se ha homenajeado al General Palafox con una corona de Laurel.


2 de Noviembre del 2008.
Acabo este reportaje con un fragmento de Los Episodios Nacionales, de Galdós.
¿Zaragoza se rendirá? La muerte al que esto diga. Zaragoza no se rinde. La reducirán a polvo: de sus históricas casas no quedará ladrillo sobre ladrillo; caerán sus cien templos; su suelo abrirase vomitando llamas; y lanzados al aire los cimientos, caerán las tejas al fondo de los pozos; pero entre los escombros y entre los muertos habrá siempre una lengua viva para decir que Zaragoza no se rinde.